Los humanos como la imagen y semejanza del Gran Tribiunos, su cotidianidad se mueve entre siempre e innatamente entre cristoLimites pero no reconoce la causa-causa porque viendo no ve ni oyendo no escucha porque no está dispuesto a ser sanado y liberado porque ama la diversidad pero no se interesa en la causa-causa la cual cambia los corazones
Los humanos como la imagen y semejanza del Gran Tribiunos, su cotidianidad se mueve entre siempre e innatamente entre cristoLimites pero no reconoce la causa-causa porque viendo no ve ni oyendo no escucha porque no está dispuesto a ser sanado y liberado porque ama la diversidad pero no se interesa en la causa-causa la cual cambia los corazones